Por muchos años me negué a tener una mascota y hace poco en un evento de adopción, me bastó con ver a un perrito a los ojos para conectar con él y olvidarme de todo el temor y las excusas que había puesto durante tantos años.

Al igual que yo, muchos se prohíben tener una mascota por la responsabilidad que conlleva, incluyendo el impacto que puede tener la limpieza del hogar. Y aunque muchos piensan que tener una mascota es sinónimo de tener la casa sucia, eso solo será cierto si no le das la atención necesaria ni a tu perro ni a tu hogar.

Con la llegada de una mascota, la limpieza y el mantenimiento de tu casa seguirá siendo el mismo que has llevado hasta ahora. Solo necesitarás agregar un poquito de esfuerzo, hacer uno que otro cambio de rutina y seguir estos consejos.

1) Limpieza regular y profunda

Además de una limpieza regular, realiza periódicamente una limpieza profunda, sobre todo en los espacios donde más tiempo pasa tu mascota.

2) Elimina el mal olor

¿Te ha pasado que llegas de visita a un lugar y tan pronto entrar a la casa te arropa un aroma muy fuerte parecido al amoníaco? Entre saludos y abrazos disimulas taparte la nariz, mientras automáticamente comienzas a calcular una escapada estratégica para acortar la visita. ¡Grave! Pero no es justo culpar a las mascotas.

Para lograr convivir con tu mascota en un hogar sin mal olor, lo primero que debes hacer es abrir todas las ventanas para que haya una buena ventilación. Luego limpia todas las superficies y el piso con productos naturales y libres de amoníaco, como nuestro Limpiador Multi-Uso Green Choice. Utilizar productos con amoníaco no es saludable ni para ti, ni para tu mascota y además, la orina del perro tiene un olor muy similar a éste. ¡Al mezclarlos podrías crear una bomba de mal olor!

Cuando termines la limpieza del espacio, te sugerimos rociar un poco del Deodorizador Aroma de Montaña Dream Clean en la habitación o humedece una toalla de papel con el producto y déjalo en el recipiente de la basura.

3) El gran problema de los pelos

Además del mal olor, el gran desafío de vivir con algunos perros (según su raza), es el problema de la caída del pelo.

De repente te encuentras en tu casa con pelos volando, pegados a los muebles y alfombras, y regados por todo el piso.

Para resolver este problema, tu aliada #1 será la aspiradora. Si usas solo la escoba, más de la mitad de los pelos se quedarán en el suelo. Aspira regularmente, al menos dos veces por semanas, sobre todo si tienes alfombras.

Tu aliado #2, será un paño húmedo. En vez de pasar un trapo seco, la humedad del paño atrapará los pelos de las superficies y muebles. ¿La mejor opción? Los paños microfibras. ¡Adquiérelos haciendo clic aquí!

4) Las que más sufren, las alfombras

El artículo del hogar que más sufre con la llegada de una mascota, son las alfombras. Y no hay que deshacerse de ellas, simplemente darle un poco más de cuidado.

De nuevo, para la limpieza de éstas la aspiradora será muy importante. Aspirar regularmente, mínimo dos veces por semanas, es recomendable para que la alfombra no acumule mucha suciedad ni mal olor producidos por los animales.

Un producto milagroso (como su nombre lo indica) que recién llegó al Dream Clean Store, es el removedor de manchas y olor de Nature’s Miracle, con el que podrás liberar tu alfombra de cualquier mancha o mal olor, generado por tu mascota.

¿Sabías que tu alfombra puede contener cuatro veces su peso en suciedad y hasta más de 4,000 gérmenes que tu inodoro? Si necesitas más consejos para el cuidado y la limpieza de tu alfombra, no te pierdas nuestro artículo “Tips para la limpieza de alfombras”, haciendo clic aquí.

5) La higiene y la educación de tu mascota son muy importantes

La idea no es solo tener una casa limpia, pero también una mascota con buena salud, higiene y educación.

Un baño habitual (al menos una vez al mes), un cepillado constante y una buena higiene bucal, harán que tu perro goce de buena salud y además se sienta limpio y cuidado.

Te aconsejamos invertir tiempo en educación, para que tu perro aprenda a hacer sus necesidades fuera de la casa, evitando que marque cualquier territorio en el interior de tu hogar, el cual se volverá su esquina designada a la hora de orinar.

Un buen hábito también es contar con pañitos húmedos especiales para perros, para limpiar las patas cuando tu mascota salga afuera de casa. Eso evitará que traiga toda la suciedad del exterior a tu hogar. ¡Imagínate todo lo que arrastrarían tus pies si salieras descalzo a la calle!

Por último, mantén limpias su pertenencias, incluyendo su camita y sus juguetes, ya que en estos también se acumulan suciedad y bacterias.

Y recuerda, no compres tus mascotas. Hay muchos animalitos esperando por una nueva familia. ¡Adopta!